Esta pasada semana santa tocó relajarse un poco y disfrutar en familia, que muchas veces nos olvidamos de dejar el estrés y las obligaciones atrás y simplemente disfrutar de lo que estamos haciendo, pero sin agobios y sin esperar nada. Así que mi hermana me invitó a hacer un taller casero de camisetas pintadas con mis sobrinos y ahí que nos pusimos a pasar un día genial. Y arriba podéis ver el resultado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario